La generación de energía en Chile en 2024 se ha visto potenciada por un notable aumento en la participación de energías renovables, alcanzando un 68%, con un 35% proveniente de fuentes variables como la eólica y solar.
Las plantas solares y eólicas han logrado un cambio significativo en la prestación de servicios de seguridad, alcanzando una participación del 100% en ciertos momentos del día, lo que ha llevado a una reducción de costos en un 80%.