Las autoridades locales y civiles han descubierto miles de restos humanos en un centro de exterminio vinculado al crimen organizado en Jalisco, revelando la magnitud de la violencia en la región.
La demolición de una casa en Quinta Normal, ocupada ilegalmente por la banda delictiva "Los Pulpos", deja al descubierto una red de arrendamiento ilegal que albergaba a más de cien personas en condiciones precarias.